Plan de Salud

1. Principios Fundamentales de la Nueva Salud Cubana

La reconstrucción del sistema de salud en Cuba Libre debe apoyarse sobre pilares sólidos que respeten la dignidad humana, la libertad individual y el derecho natural a decidir sobre la propia vida y cuerpo.

El sistema no debe ser una prolongación del aparato estatal, sino un espacio de plena libertad, responsabilidad y competencia.

Los principios básicos que regirán la salud en Cuba Libre serán:

2. Estructura General del Sistema de Salud

El sistema de salud de Cuba Libre debe ser coherente con los principios de libertad individual, propiedad privada y libre competencia.

Por tanto, su estructura debe estar diseñada para dar máxima libertad al ciudadano, incentivar la excelencia médica y garantizar orden en el funcionamiento de un sector vital para la vida nacional.

Cada punto se desarrollará pensando en cómo debe funcionar en la práctica cotidiana, evitando modelos teóricos o burocráticos.

3. Fases de Implementación del Plan Nacional de Salud

Transformar el sistema de salud de una Cuba postdictadura hacia un modelo 100% privado, libre y federal requiere una estrategia por etapas, que garantice:
– Orden en el cambio.
– Respeto a la propiedad y a la libertad individual.
– Estabilidad social durante la transición.
– Rapidez en la consolidación del nuevo sistema.

Cada fase tiene objetivos claros y pasos específicos.

4. Aspectos Especiales del Sistema de Salud Privado en Cuba Libre

Además de la estructura básica y la implementación general, existen áreas estratégicas que deben ser organizadas desde el principio para garantizar la excelencia, la competitividad y la estabilidad del sistema médico cubano.

Estas áreas refuerzan la libertad individual, la propiedad privada y la solidaridad voluntaria en el sector salud.

5. Beneficios Estratégicos del Modelo de Salud Privado para la Cuba Libre

La implementación de un sistema de salud 100% privado, competitivo y basado en la libertad individual traerá a la nueva Cuba beneficios profundos, sólidos y duraderos.

No será simplemente un cambio administrativo, sino una verdadera transformación cultural, económica y social que colocará al ciudadano en el centro de su propia vida y destino.

Aquí presentamos los beneficios principales de este modelo:

6. Conclusión Final

La salud en la Cuba Libre debe ser un reflejo de los principios sobre los que se edificará nuestra nueva república:

♦ libertad, responsabilidad, propiedad privada, respeto a la dignidad humana y competencia libre.

♦ Durante décadas, la dictadura convirtió el sistema médico en un instrumento de propaganda, de control social y de humillación colectiva.

♦ Hospitales ruinosos, médicos maltratados, pacientes tratados como mercancía política: ese ha sido el verdadero rostro del llamado “sistema de salud pública” cubano.

♦ La reconstrucción nacional exige romper de raíz con ese pasado de miseria moral y estructural.

♦ La salud no puede seguir siendo una promesa incumplida del Estado ni una herramienta de manipulación política.

♦ La salud debe ser libre.

♦ La salud debe ser privada.

♦ La salud debe ser digna.

♦ Cada cubano tendrá el derecho y el deber de cuidar de sí mismo, de su familia y de su salud como adulto responsable.

♦ Cada médico ejercerá su vocación con libertad, competencia y honorabilidad, sin someter su conciencia a burócratas políticos.

♦ Cada hospital, clínica, farmacia y aseguradora será una manifestación de la capacidad humana para construir, servir y prosperar en libertad.

Habrá solidaridad, sí:

♦ Pero será una solidaridad voluntaria, genuina, moralmente superior al asistencialismo impuesto.

♦ La beneficencia médica será un acto de honor, no de esclavitud política.

♦ En la nueva Cuba, la salud no será un favor del Estado:

♦ Será un derecho que cada cubano ejercerá con libertad y responsabilidad.

♦ No levantaremos hospitales de piedra si no levantamos primero hospitales de libertad.

♦ No sanaremos cuerpos si no sanamos primero el alma de la nación.

♦ No reconstruiremos la patria si no devolvemos al ciudadano su condición plena de hombre libre y soberano.

♦ El Plan Nacional de Salud que aquí proponemos no es simplemente un proyecto técnico.

♦ Es una declaración de principios.

♦ Es una afirmación de dignidad.

Es una piedra angular para la nueva República de Cuba: libre, justa, fuerte y verdaderamente humana.